Al cumplirse 16 años de la gran inundación de 2007, el coordinador General del Instituto de Protección Civil del Estado de Tabasco, Mauro Winzig Negrín dijo que ‘no nos podemos confiar’ y hay que seguir tomando medidas de prevención.
Señaló que no se puede descartar un tragedia como esa, porque nadie maneja a su antojo a la naturaleza y prueba de ello es lo que está pasando en Guerrero.
Agregó que afortunadamente las inundaciones en el estado han dejado conocimiento y la instrucción actual del gobernador Carlos Manuel Merino Campos es estar preparados con los planes de acción en caso de contingencia.
Indicó que además la población ha aprendido a vivir en una ‘cultura del agua’ y sabe cómo enfrentar las afectaciones que se presentan por la crecida de ríos y lluvias muy fuertes, especialmente en zonas ya identificadas como de vulnerabilidad.